Antes de nada, explicaros lo que es un furancho…Un furancho es un pequeño rincón de la geografía gallega en el que se dan cita los mejores ingredientes de esta tierra: buena comida, buen vino, naturaleza y gente amable..En esencia, son casas particulares, con alguna zona habilitada para que los visitantes puedan degustar el vino propio de la finca, acompañándolo de unos manjares caseros a la altura de la calidad de la vino. Ese el el verdadero secreto de los furanchos: ofrecer comida casera con productos propios, como la que hacían las abuelas, vamos…

Normalmente se encuentran en núcleos alejados de los pueblos y ciudades, lo que hace que encontrarlos y llegar hasta ellos sea a veces una pequeña aventura. Incluso en los mejores casos (para qué engañarnos) se descubren uno o dos furanchos más antes de alcanzar el que se buscaba.

Uno de ellos es A de Pastora, un sitio con mucho encanto en pleno valle del Salnés donde probamos sus buenísimos chipirones (imprescindibles) , zorza adobada y cordero estofado, todos los platos muy abundantes y acompañados de unas patatas fritas caseras de saltársenos las lágrimas… De postre una tarta de queso impresionante y albariño, orujo y licor de café caseros, de los cuales nos llevamos unas botellas para nuestra tierra para poder recordar una vez allí esta buena experiencia y el buen trato dispensado por Pastora.